Amargar no es curar

Tratamientos, sí. La gente, por lo general, por lo que debería seguir siendo, haciendo o creyendo, es sentirse bien. Pero no sólo respirando o comiendo, sino intentando ser más y mejor, y no contentarse con prestaciones y ayudas, y pasar la mañana en el bar, o criticar a l@s que van de compras.

Así, abro la puerta sl tema de las terapias, a la creatividad sin límites, a los días a vivir de película sana, felicidad, a abrir los ojos y ser más, a apreciar lo que tenrmos, somos, poddmos lograr, a aceptar las habilidades y capacidades, a ser mejores, y no sólo tú o yo, sino tú, yo, él, ella, nosotros, todos... 

Terapias hacia las posibilidades, abertura de conocimientos, posibilidades a trabajos, creaciones, vuelta al pasado pletórico aunque hagamos uso de madcarillas y geles, diversión y riqueza, y no estropicios, enfermedades, malos tratos o humillaciones a la gente, de forma no sana, ni social, ni divertida, y mucho menos, placentera. 

Abertura de mentes, continuación del progreso, no sólo el rico o el ingeniero deben ser millonarios, ni todas somos mejores siendo amas de casa o cocineras, y la familia no es lo único que importa, ni lo único que hay que poseer.

Dile adiós a quién se cree superior y merecedor del esclavismo, a quién no nos quiere hacer felices, y disfrutar sólo él o ella de casas, ropas, hoteles, alimentos... Dile adiós al Robin Hood que no estudia ni trabaja, que sólo quiere robar al ric@, y estropear los juegos al rebaño de trabajadores. Dile adiós a quién no respeta tus gustos, ideas, vestidos, intereses, planes...

Y dile adiós a tu terapeuta, psicólog@, abogad@, doctor, psiquiatra si no va bien, y búscate otro, que si te ayude a florecer, sea la edad que sea, y no a marchitarte, estropearte o rebajarte, y mucho menos, empeorar, en vez de mejorar, o sanar.