Es cierto que hay muchas relaciones por intereses, pero sigue existiendo el amor sincero, fresco, rejuvenecedor y vivo en muchas personas, parejas o grupo de poliamorosos que están juntos, a veces, como los matrimonios, en lo bueno y malo, dinero y pobreza, etc (incluimos en estas relaciones muchos matrimonios también).
Los adolescentes y jóvenes, los primeros que lo sienten, viven y si es mutuo, disfrutan. Pero más adultos y mayores, también: no por no tener 15 años se deja de sentir, aunque no siempre la misma intensidad o con experiencias, pero el sentimiento nace y existe. Y no es por consumo de drogas, como a veces se hace creer, o por impulsos biológicos, que eso es puntual, pasional y meramente sexual.
Si bien es cierto que algunas perversiones no encajan, aunque haya algunas excepciones, no se trata de salir con alguien más joven que tú o tener relaciones sexuales con alguien que no ha tenido nunca por rejuvenecer. Quizás sí llevar looks de tu agrado, probar un nuevo peinado, tener nuevos hobbies con el o los agregado/as y planear encuentros amorosos y otras actividades a disfrutar. Revivir experiencias de tu gusto con ese alguien, disfrutar nuevas, experimentar juntos, vivir un día a día, planificar un futuro...
Sentirse bien de nuevo con alguien no es irreal o insano. Sentir paz, tranquilidad y estabilidad con esa persona que te gusta es realidad saludable, ya que no siempre la inseguridad, sumisión constante o sentir malestar no es sinónimo de bienestar en pareja, aunque alguno/as se adapten y lo encuentren divertido y lo vivan así. Y no siempre, un imposible.
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