martes, 26 de septiembre de 2023

Hacer y ver pornografía, a su tiempo y en el espacio debido

No estoy en contra de la pornografía ni que en algunos casos haya prostitución, siempre que sea algo consentido por ambas partes y no por voluntad, comentario o mentira de una de las partes (¿cuántos hombres llaman putas a ex parejas o mujeres que no se acuestan con ellos por despecho?) pero hay formas de proceder y hasta debería ser estipulado por escrito y legalmente.

Si bien debe haber un horario y espacio estipulado, un equipo técnico, unas condiciones adecuadas, se sabe que hay gente que parece hacer burla acerca de realizar el acto sexual en el trabajo, funciones no eróticas ni pornográficas, como si fuese lo normal. Podría decirse que si de forma romántica hay amantes fornicando en el horario laboral en empresas públicas o privadas de x número de trabajadores, las personas que no hacen porno o van a realizar sus funciones laborales perciben como una burla que alguien crea que cobra por tener relaciones sexuales mientras otras ejercen, exprimen su cuerpo, cerebro y hasta a veces ponen en riesgo su persona por el mismo precio en una empresa donde no se paga por realizar el acto sexual. Otra cosa es que alguien tenga un contrato de realizar el acto sexual en empresas con sus trabajadores internos...

Podemos pactar horarios exclusivos laborales para ello, y también extralaborales para los encuentros sexuales sean amorosos o no, y no poner en riesgo el puesto de trabajo, el salario, la reputación profesional o la falta de compañerismo. Al igual que ver porno (si no es por tema de investigación), es mejor en sitios privados a x edades y discerniendo, que no educando que a través de realizar el sexo alguien lo puede tener todo (quizás en pornografía y prostitución), porque no es así o no debería ser así...

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