lunes, 3 de agosto de 2020

El fracaso del avance, y cómo paliarlo

El ser entre nosotros diferentes es necesario, aunque a veces tengamos similares gustos o apariencias, pero es verdad que a veces, demasiado avance, puede hacer empobrecer o atrasar a al población.

Si bien es cierto que algunas máquinas de deporte, avances tecnológicos para la salud, especialmente, y similares, son necesarios, así como para diversos trabajos o construcciones, en Medicina, curas, etc no siempre todo es progreso. Quizás muchas veces el aparato automático de aspiradora se estropea pronto o sale más caro que una escoba, o eliminan puestos de trabajo cuando a veces es importante que haya más personal en caja que máquinas rápidas, o no es necesaria tanta escalera automática cuando a veces si son más necesarios los ascensores.

Con tanto avance, se ha incluso abaratado la calidad de servicios, dedicando a más gente a las mismas profesiones, cuando podría ser más variado. Calidad, cantidad, van cambiando, y no siempre es mejor, no: quizás en 2 años has tenido 2 reproductores de dvds diferentes, cuando hace 20 años 1 reproductor vhs era para toda la vida. O aquél mango de escoba o fregona, de marca cara, te durarba un poco más que el de gama blanca, cosa que hoy, es de duración casi similar.

Así como es cierto que quizás no podemos tener coche, avión mansión en el campo, barco, yate, etc como los multimillonarios, porque no todos lo tenemos, y muchos acaban perdiéndolo todo por naufragar en su propio sueño imposible (porque a veces es mejor viajar con el avión que cogen 50 personas que tener uno exclusivo que quizás no puedes ni pilotar), con lo cual, el avance a la individualidad en todo es absurda. Una cosa es la vivienda, el usar una ropa, el no compartir la pareja amorosa sexual, y la otra, que todos seamos que ser un único ser que sólo viva a través de tecnología y bajo las mismas normas, sin que haya covid y cosas de esas (porque actualmente tenemos que seguir protocolos de seguridad y es lo que hay).

Muchos avances son más costosos y no son siempre útiles. Quizás una balanza, báscula o un termómetro digital sean más necesarios, pero quizás no necesitamos una luz que se encienda con palmadas en todas las casas.

A veces, tener algo muy bueno y novedoso hace que nos empobrezcamos. Quizás tenemos un ordenador nuevo que en 4 meses, en vez de costar 800 euros, valga 300 euros, y a veces, comprarlo menos nuevo, nos salva de poder tener un nivel de vida más saludable y completo, que sólo si disponemos del último modelo de producto del mercado, y no podemos ir al cine a ver ese estreno que tanto nos apetece  de ciencia ficción.

También hay mucha gente que sigue teniendo miedo a los médicos, dentistas, ginecólogos y urólogos, y ello hace que se consuma en exceso más productos como  alcohol, comida en cantidades  o tabaco, en vez de acudir al profesional que pueda ayudar a cambiar de estilo de vida, arreglar los dientes o dejar de tener miedo a ser una/a mismo/a. El avance a veces sigue discriminando a muchos profesionales de la salud y haciendo creer en lo que uno/a mismo/a cree, siendo muchas veces mentiras, en vez de consultar a los médicos por vergüenza o por ocultar sus patologías.

También el avance hace que se nieguen nuevos profesionales por falta de ayudas, becas, y apoyo; muchos profesionales han sido mal considerados por no decir lo que al gente quiere escuchar, y se seguirán necesitando de forma profesional en muchos campos, áreas, y el ampliar conocimientos de forma realista y ética, y no generalizar algo que es sólo lo que padece un pequeño grupo, aunque el saber no ocupa lugar. El aumento de bullying, moobing y acoso laboral ha hecho que mucha gente abandonara estudios, y, en vez de pararlo, ha aumentado acabando con muchos futuros profesionales, así como la pobreza, que podrían ser mejor que aquéllos que acabaron el instituto y dejaron de estudiar pudiendo seguir. Incluidos los traductores y médicos.

La falta de sentido del humor, la pérdida de valores, de ética, falta de tolerancia de gustos, el querer que todos vayamos al unísono, haciendo lo mismo, el no dejar opinar, la falta de sexualidad placentera mutua sin que sea prostitución, el exceso de pensamiento positivo que puede hacer enfermar y no ver la realidad,  la discriminación por la belleza y hombres entre muchas mujeres, tener hijo/as sin poder mantenerlos, la falta de paciencia, de tolerar las diferencias, la superficialidad vacía, el criticar los defectos ajenos y no saber reconocer los propios, estos "complots" de mucha gente que sólo te admiten si eres del mismo equipo o piensas como ellos, y si no, eres un "patito feo" o alguien mal visto, como si ir a vivir al campo o estar en ciudad fuera mejor o peor.

Y por supuesto, la decadencia por el exceso consumo de drogas, que, aunque siempre ha existido, es algo que parece siempre estar presente, de alguna forma u otra, aunque sea llevándola en partes íntimas del cuerpo.

A veces, es mejor seguir igual y seguir viviendo, que ir a demasiado y no poder costearlo, olvidar el sentido de la realidad, de lo que  es cierto, deseado  y asequible para cada uno/a, que perder más de lo que se tiene y no tener nada.

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