Sin embargo no siempre es así. No siempre hay amor sea lo fugaz o esporádico que sea, y muchas relaciones se basan algunas quizás en amistad, pero otras son más pasionales, sin contemplar el amor, sino sólo el factor placer, especialmente, sexual. Y lo peor es cuando el modelo prostitución sexual, existente y ejercido legalmente, se vuelve ilegal y hasta parece que hay tráfico de parejas, de personas, individuos. Y lo peor, que a los niños ya se les enseñe está prostitución como si la novia fuese su puta, o que no quieran relaciones de amor por pensar que todos somos objetos sexuales.
Reeducar, reenseñar. Infantilizar. Volver a educar, tratar al enfermo, eliminar a grosdo modo la prostitución en el amor y volver a lo liberal o conservador, según se guste. Separar sentimientos, pensamientos, del negocio no del todo legal. Recordar que el amor no es un trabajo para todos, y que la pareja no es siempre alguien que quiere a alguien por su dinero, sino, lo que debería ser, a la persona.
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