Hoy en día, lejos de cómo alguno/as vivíamos en tiempos pasados de casa, coche, compras, viajes, gimnasio, citas, cenas, etc , la crisis ha aumentado las diferencias de clases, y alguno/as tuvimos que cambiar demasiados placeres por motivos económicos, salud y, sobretodo, por problemas a los que nos puede repercutir la codicia de muchos, y falta de ética, ayuda o mantenimiento de otros.
Mucha gente empezó a endeudarse en viajes, siendo sus padres quienes pagsn las facturas del hogar. Falta decayuda en casa hace que algunas fsmilias ni hayan podido visitar la capital del Estado, mientras sus hijos han visitado medio mundo, y no hayan sido capaces de mandarles una postal, y esperando la cena en casa cuando llegan.
La lujuria es una posible causa o consecuencia de las adocciones a romances, affaires, que pueden desembocar en onfidelidades, regalos costosos tanto a novias o esposas como amantes, divorcios caros, un gasto excesivo en hoteles, una libreta de amantes sin número y problemas de relaciones sin sexo que no todos saben llevar, así como una posible esxlavotud sexual de algunas personas para costearse sus facturas, gastos, caprichos...
La moda es maravillosa, pero no todo el mundo puede permitirse ese lujo diario o temporal. Quizás de soltera, casa, divorciada y ganando fortuna algunas pueden costearse las marcas más caras y estar a la última en todos modelos, pero renunciando a viajes, citas, pisos propios, etc mientras otras ni podemos jugar, y para algunos, parecemos ridículas por llevar Hym y Zara y no Dior o Dolce&Gabanna, como si por ello fuésemos menos. Por no decir, madres solteras que no reciben ayudas de sus familias, o señoras que prefieren ir de cenas.
Comer es un placer, pero el abuso incomedido de x alimrntos, mezclas o hábitos conlleva a no sólo cambios físicos, sino problemas de salud, estética incluida, y a veces, mentales.
Nos gustan los coches, pero si no podemos mantener un Audi, ¿para qué comprarlo?
Hay gente que presume de cada con jardín y piscina, la mejor de la ciudad o pueblo, humillando a los de ciudad con apartamentos modestos por no ser como ellos. Quizás a la larga, la piscina no es lo que usan, o no les gusta estar demasiado en el jardín, y la chica de ciudad prefiete su piso con su gato que una mansión en la que le cuesta la vida limpiarla.
Estudiar es interesante, peto hay gente que, sin estar centrada, tiene ddmasiados estudios y puede tanto hacer el bien como el mal, o liarse. Quizás nontodos somos doctores ni soñamos con carreras de Podología, mientras algunos físicos ni son fan de Hume o Kant, o la enfermera no cocina tortilla por no ser su especialidad. Y bienvenida la variedad; hay vente, que por estudiar mucho, se deja mucho dineto, salud, etc siendo innecesario esa masía, cuando quizás leer diversos libros es más economico, y no todos debemos ser traductores, limpiadores, mecánicos y doctores a la vez.
El lujo de lo caro sale, muchas veces, tóxico, enfermizo y pernicioso.
No hay comentarios:
Publicar un comentario