La empresa privada es necesaria. Por servicios, ofrecer empleos, cubrir necesidades y dar salarios a personas trabajadoras. No es que no se quiera ser funcionario, pero quizás personas aceptan seguir vocaciones, trabajos de su gusto, consiguen una estabilidad interesante, y a veces, ayudan a la pública o ayudan a corregir errores en ellas, además de detectar acoso, terrorismo y moobing por parte de personas funcionarias (a veces se da...,).
No está todo reñido. Hay empleados públicos con oficios compatibles en lo privado, sea artístico u otra clase, pero quizás no se merecen su aceptación social, a veces en aumento, como policías, vigilantes, reponedores y personal de Salud que siempre está allí trabajando de Lunes a Domingo en cualquier horario.
Así pues, ni todos los trabajadores de la pública son mejores ni todos los de la privada, los desperfectos, porque a veces, por ejemplo, encontrarás una fabulosa psicóloga en lo privado, mientras en la pública, habrá quien incluso te humille o rechace, "si no eres tan guapa para trabajar aquí", si no eres de su gusto.
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